Es una receta sencilla y con pocos ingredientes pero muy laboriosa.
Me regalaron estás dos preciosas calabazas variedad cidra, una con un peso de 1.500 gr y la otra 1.300 gr, estaban justo en su punto para poderlas hacer, así que una tarde me puse y le metí mano a las dos a la vez, qué de tiempo me tiré con la dichosa cidra pero la verdad que mereció la pena, qué rica me salió!!
Vamos allá con ella.
INGREDIENTES:
calabaza tipo cidra
azúcar (la mitad del peso de la carne de calabaza limpia y escurrida)
2 ramas de canela
la piel de un limón
PREPARACIÓN:
Lavar muy bien las calabazas antes de partirlas. Con ayuda de un cuchillo grande las cortaremos a trozos.
Las ponemos en una olla cubiertas con agua y las dejaremos cocer hasta que estén blandas y le aparezcan las hebritas, ésto será sobre una hora y media aproximadamente. Yo tuve que ponerlas entre dos ollas grandes.
Una vez cocidas dejar enfriar fuera del agua puestas a escurrir.
Quitar las pipas.
Separar las hebras con la ayuda de un tenedor.
Escurrir bien apretando con las manos, pesar la cantidad obtenida y añadirle la mitad de su peso en azúcar. A mi me pesó ya escurrida 1.150 gr, así que tuve que ponerle 500 gr porque siempre me gusta quedarme un pelín corta en azúcar.
Le ponemos la piel del limón bien lavada y la canela.
La ponemos a fuego lento dando vueltas a cada momento, así hasta que se termine de hacer.
Iremos viendo como cambia de color y como se van separando las hebras.
Cuando la hayamos terminado de hacer, todavía caliente la envasamos en botes esterilizados, tapamos y ponemos boca abajo para que hagan el vacío.
Y ya tendremos nuestro cabello de ángel listo para utilizar a conveniencia.